Octava Guerra Enana

De Lurra
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La Octava Guerra Enana fue un conflicto militar que se desarrolló entre 5602 y 5691, abarcando el continente Nion. En ella se vieron implicadas la mayor parte de las naciones enanas, agrupadas en dos alianzas militares enfrentadas: los Integristas de la Octava Guerra Enana y los Expansionistas de la Octava Guerra Enana.

Fue la última contienda bélica de la historia, con más de cien millones de militares movilizados y un estado de «guerra total» en que los grandes contendientes destinaron toda su capacidad económica, militar y científica al servicio del esfuerzo bélico, borrando la distinción entre recursos civiles y militares. Marcada por hechos de enorme repercusión, que incluyeron la muerte masiva de civiles, fue una de las guerras más mortíferas de la historia; con un resultado de entre 30 y 60 millones de víctimas, el 5% de la población de Nion.

El comienzo del conflicto se suele situar el 11 de Cuarto de 5602, con la anexión de la República de Mengyu por parte del Conglomerado Kofu, el primer paso en su pretensión de fundar una república que unificara a toda la raza enana. Esto produjo la inmediata declaración de guerra de Ajiwa con la mayor parte de los países del Tratado de Defensa Oriental al Conglomerado Kofu.

Situación política previa a la guerra


Desarrollo de la querra entre 5602 y 5647

Desde el comienzo de la guerra hasta finales de 5647, gracias a una serie de campañas militares y firmas de tratados, el Conglomerado Kofu conquistó o sometió gran parte de Nion occidental. En Decimosegundo de 5647, el resto de fuerzas que conformarían el bando de los Expansionistas de la Octava Guerra Enana realizan una declaración conjunta de apoyo al Conglomerado Kofu, dando comienzo a la etapa más sangrienta de la guerra.

Desarrollo de la guerra entre 5647 y 5654

El avance de las fuerzas expansionistas resultaba imparable. Gracias al desarrollo tecnológico, realizan intensos bombardeos a las ciudades del bando integrista.

Sin embargo, este avance se vió detenido durante la batalla de Ichiban, donde las fuerzas expansionistas perdieron todos los efectivos militares que habían desplazado hasta allí; siendo estos una parte importante de sus fuerzas.

Desarrollo de la guerra entre 5654 y 5691

Con las fuerzas de ambos bandos terriblemente debilitadas, el tramo final de la guerra consistió en una suerte de guerra de guerrillas en la que cada bando trataba de agotar a su oponente antes de agotarse ellos mismos.

La guerra terminó con la captura de Aianpīku y la posterior firma del Tratado de Heiwa, donde las fuerzas expansionistas aceptaban su rendición incondicional.

Como parte del acuerdo de rendición, las fronteras fueron restituidas a su situación previa al conflicto.

Consecuencias

Situación política tras la guerra

La Octava Guerra Enana alteró las relaciones políticas y la estructura social de Nion. Las tres Comunidades Enanas fueron creadas tras la conflagración para fomentar la cooperación continental y prevenir futuros conflictos. Aunque no todos los países se unieron a las Comunidades Enanas, la influencia de las grandes potencias enanas se declinó y la tensión entre las mismas se relajó.

La mayoría de los países cuyas industrias habían sido dañadas iniciaron la recuperación económica, mientras que la integración política emergió como un esfuerzo para establecer relaciones de posguerra.